De Toti Martínez de Leza, subtitulada "La epopeya del pueblo
astur", podría considerarse una novela histórica, género que cultiva la
autora en más de una ocasión.
La trama novelesca se remonta a la época de
la dominación romana en la península, concretamente al año25 a.C. Nos habla, pues,
de unos hechos tan remotos que, forzosamente, habremos de pensar que historia y
ficción se funden constantemente hasta darnos una idea realista y trágica de
los acontecimientos de aquella lejana época.
"La voz de los cuernos retumbó por
los valles, voló por encima de los montes, atravesó los desfiladeros, vadeó los
ríos y llegó a todos los confines de la tierra de los astures. Su mensaje era
claro para todo aquel que conociera su significado: el enemigo se había puesto
de nuevo en marcha"
Con esta dramática entrada se inicia la
novela. Con ella se anticipa casi todo el resto del relato y, sin embargo, no
resta un ápice de interés por la lectura; más bien despierta el interés por
saber qué ocurrirá a partir de ese momento.
Esto nos
lleva a reflexionar un instante sobre la importancia de un buen principio. Me
viene a la memoria a propósito la frase con que empieza CRÓNICA DE
UNA MUERTE ANUNCIADA:"El día que lo iban a matar, Santiago Nasar
se levantó a las cinco treinta de la mañana…”; o el inicio de PARAÍSO
INHABITADO:"Nací cuando mis padres ya no se querían". En ambos
casos, creo que la impresión sobre el lector es semejante a lo que ocurre al
leer el inicio de la novela que nos ocupa.
El protagonista de la historia es Luam, jefe
de los cilúrnigos de Noega (actual Gijón).A través de él conoceremos la
antiquísima historia de los astures, una historia poco conocida por ser tan
lejana y confusa. Se nos habla de las costumbres, y luchas por sobrevivir y
escapar al domino romano, del pueblo astur.
Por ejemplo, su religión. Se habla de sus
dioses: Coso, el dios de la guerra; Deva, la diosa madre protectora de la tribu
de Luam; y ,sobre todo, el poderoso" Lug − el dios de dioses del cual su
tribu, la más numerosa, era orgullosa descendiente…." Hacen fiestas en
honor de sus dioses y procuran escuchar sus mensajes. El Hombre Sabio, algo así
como un sacerdote, considera curiosamente que "el humor de los dioses
es frágil. Es como el clima de estas tierras, tan pronto luce el sol como cae
la lluvia…."
La autora describe con minuciosidad los
oficios, los trabajos de las gentes, sus viviendas, sus fiestas etc. Lo hace,
además con gran realismo al igual que cuando cuenta las batallas o las acciones
de los romanos contra el pueblo rebelde.
No obstante, concede, a veces ,a los
personajes una sensibilidad y delicadeza impropias (diríamos) de aquellos
rústico y casi salvajes seres humanos. Por ejemplo llama la atención, entre
otros, un momento casi al final de la novela:"Contempló a Lenore,
dormida a su lado, con su cabello desparramado sobre el colchón de hierbas y la
sonrisa en los labios. Nunca había estado tan hermosa como en aquel momento.
Besó suavemente sus labios, sus ojos…..Se amaron con dulzura, en silencio, sin
prisas….."
De las conversaciones entre el Hombre Sabio
y Luam se extrae su filosofía de la vida:
"la muerte no existe, Luam……los cuerpos se
transforman, cambian, pero no mueren..
-Morirá
nuestra forma de vida…
-Se
transformará…..Mientras uno solo de nosotros permanezca, también permanecerá la
herencia de nuestros antepasados…".
¿Encierran estas palabras un mensaje acerca
de la idiosincrasia de los pueblos, del carácter peculiar de cada pueblo de
nuestra península? .Podría ser.
Entre tanta crueldad y desgracia como
acarrea la dominación romana sobre los personajes del relato, destaca una
hermosísima historia de amor. La de Luam y Lenore que superan situaciones casi
inverosímiles.
Aparte el amor, otros sentimientos positivos
destacan a lo largo de la novela: amistad, camaradería, valentía rozando la
heroicidad, las virtudes en el comportamiento ." la paciencia es una
virtud tan importante o más que el valor"..; laboriosidad y ,tal vez
por encima de todos, ansia de libertad: "….se le antojó a Luam un
momento mágico, como si las aves bordadas adquiriesen vida y surcasen libres
los cielos de Asturias. Así, también ellos, hijos de la vieja tierra, serían de
nuevo libres al igual que lo habían sido sus padres….."
Si en las descripciones de batallas,
enfrentamientos entre romanos y astures así como en las del modo de tratar los
invasores a los vencidos, la autora es extremadamente realista, en la de los
personajes, sus ideales y los paisajes pone un indiscutible toque poético.
Así "…el jefe. joven y
musculoso…";
"..el
Hombre Sabio anciano y frágil de largos cabellos y barba blancos…"
"…Su
voz rompió el silencio del atardecer envuelto en los reflejos dorados y rojizos
de las últimas luces solares.."
"…los
cabellos de sus hijas (las de los orfebres) eran tan dorados como aquel(
el oro que trabajaban) y no precisaban lavados con manzanilla, la flor del
sol ,para clarearlos…"
"…Lenore,….sus
ojos de un verde tan profundo como el
verdín del lecho del río…….La mujer era la representación viva de la diosa
Deva"
"…era
el rumor de las guas de los ríos bajando frescas y renovadas desde las cumbres,
la voz de la tierra despertando tras el sueño del invierno, la savia vigorosa
que alimentaba los árboles, el agitado aleteo de los polluelos, el indomable
espíritu de los astures…"
No obstante la historia no tiene un final
feliz. Las últimas frases nos informan de lo irremediable, ante un enemigo, un
invasor más poderoso y, sobre todo, con
más medios para la guerra:…"No hubo misericordia……Los valles quedaron
desiertos….y los pocos nativos que encontraron refugio en las montañas pudieron
contemplar desde lo alto la inmensa hoguera cuyo humo ascendía hacia el cielo
llevándose con él la última esperanza de libertad."
Como podemos observar la tragedia que hacía
presagiar la primera frase del relato se cumple en la última. El círculo se ha
cerrado tal y como se vieron encerrados, cercados aquellos hombres nobles y
valientes que pretendían defender su libertad, su idiosincrasia, su raza.
Mucho
más se podría decir de esta obrita pero no es mi intención desmenuzarla, sino animar a los posibles lectores a
disfrutarla. Así como a saborear otras novelas de la autora tales como LA ABASESA, o LA
UNIVERSAL. También es muy bonito su libro sobre mitología de la tierra vasca. Sin
olvidar la colección infantil NUR
Gijón entre la niebla. |
Muchas gracias por esta reseña bibliográfica. De todos modos la dominación romana y posteriormente musulmana de la región Astur, Cántabra y sobre todo vasca creo que fue muy superficial ¿no?
ResponderEliminarPues eso nos han dicho,al menos a los que hemos estudiado la Historia un poquito por encima. No obstante parece que hubo algo más. En toda la región cántabra, Asturias y otros quedan restos de la época romana así como una rica topografía de tal origen .nombres de ciudades,ríos etc. En el País Vasco, yo pensaba que ni habían entrado y cual no sería mi sorpresa cuando en una excursión de Zumaia a Getaria, a pie, me encontré caminando por los restos de una "vía romana". Incluso creo haber leído que los romanos llamaron a San Sebastián "la bella Easo". Habrá que investigar. Yo,por mi parte puedo prometer y prometo hacerlo.
ResponderEliminarEspero pues tus aportaciones.
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