Abro este blog con la intención de mantener un ameno diálogo con todo aquel que se acerque a él. Creo que lo más bonito de las relaciones humanas es esa comunicación que consiste en un intercambio de emociones, conocimientos, ideas….Esa comunicación que enriquece el espíritu.

"La relevancia de la comunicación humana, pues del contacto verbal surge un intercambio que aminora el dolor, palía la soledad y estimula el contento de vivir” Carmen Martí Gaite

miércoles, 30 de noviembre de 2022

 

   PEDRAZA. REPORTAJE FOTOGRÁFICO

  Al revisar el álbum fotográfico he encontrado esta excursión a Pedraza, un pintoresco pueblo segoviano, de esos que atesoran incontables rincones con el encanto de antaño.

  PEDRAZA.

 Localidad de la provincia de Segovia. Su nombre parece derivar de la Pretaria romana. Villa medieval amurallada, cuya rehabilitación motivó su declaración como Conjunto Histórico en 1951

 Allí se rodaron películas y series famosas de televisión como Águila roja e Isabel.

CASTILLO.

El castillo de Pedraza es una fortaleza construida en el siglo XIII que fue reedificado en el siglo XV por García Herrera. Tiene una imponente torre del homenaje, foso, y está rodeado en la mayoría de su perímetro por un precipicio.

En 1926, el pintor Ignacio Zuloaga  adquirió el castillo y lo restauró severamente, instalando allí un taller. Sus herederos adaptaron una de las torres para la exposición al público de una parte de la obra del artista. Muy interesante, por cierto.



                                             Panorámica y torre el homenaje.


                                                         Vista de un lateral



                                                                 Un rincón 



                                                    Rincón con puerta y ventana 


Patio

                                                   

                                                             Detalle del patio 


                                                      Bonito rincón del patio 

EL PUEBLO


                                                                   Plaza Mayor 


                                                                      Torre 


                                                         Torre, otra perspectiva 


                                                                Casa típica 


                                                       Entrañable rincón 


                                                       Puerta o arco de entrada 

  La puerta de la villa es el único acceso a Pedraza, y por tanto es utilizada como entrada y como salida única del pueblo. Sus orígenes se remontan al siglo xi,


                                                              Casa señorial


                                                                 Tejado curioso 


                                                                Cigüeña en su nido 


                                                           Curiosos llamador 

Espero que disfrutéis con las fotografías como yo en la visita.

 


martes, 15 de noviembre de 2022

 

  Dora y Javier, mis padres. (Epílogo)

 Cuando Guille y yo cumplimos los dieciocho años, nuestros padres nos ofrecieron un día de vida familiar intensa, hablando de nuestras cosas, disfrutándonos plenamente, algo que en ese momento iba siendo complicado. Los hijos estudiando ya en niveles y centros diferentes, con horarios distintos, ellos con su trabajo…Nos hizo mucha ilusión.

 No digo esto por quedar bien. No. Con mis padres siempre tuvimos una relación muy hermosa. Nos gustaba y nos gustó siempre su compañía; nunca recurríamos a ellos por separado, como nos contaban los amigos, aquello de se lo digo a mamá y ella que convenza a papá. No. Nosotros acudíamos a ellos cuando estaban juntos. Y qué bonito era ver cómo antes de contestar a nuestra pregunta o propuesta, se miraban y parecía que solo con eso ya sabían qué debían contestar y cuál de ellos lo haría.

   Aquel día de nuestro cumpleaños supimos cosas que aún nos faltaba por saber. Supimos, por ejemplo, que fue el abuelo Guillermo quien propuso a mamá que nos diera su apellido. Lo contó ella:

-Pues veréis. Dijo el abuelo Guillermo: Dora ¿no has contemplado la posibilidad de declararte como madre adoptiva de los niños y darles tu apellido? Pues no, contesté, porque yo no necesito ningún documento para considerarlos mis hijos, como ha quedado claro. Además, no me creo con derecho a usurpar el apellido de su madre biológica que además es el tuyo. Mira, hija, contestó, a mí no me hace falta el apellido para saber que son mis nietos, también lo son los otros dos, y nadie mejor que tú tiene derecho a que lleven el tuyo. Además, conforme cumplan años, sufrirán de nuevo las preguntas sobre los dos nombres de la madre, sobre la diferencia de apellidos con sus hermanos… Les hacemos un favor a los cuatro.

  Así es como tuvimos todos, oficialmente, una misma madre, unos mismos apellidos y, cuando nos explicaron nuestra extraña situación, la comprendimos y no nos traumatizó porque llevábamos años teniendo una madre ejemplar y extraordinaria. Qué suerte tuvo papá y tuvimos todos al encontrarla.

  Otra cosa graciosa que ocurrió fue cuando les pedimos que nos contaran más de cómo se conocieron, cómo se enamoraron…Papá casi repitió lo que ya sabíamos y no se cansaba de repetir. Cómo le había llamado la atención desde el primer momento, lo nervioso que se ponía cuando la veía o cuando le contaba su vida sólo por sentirse unos minutos cerca de ella, cómo temía  nuestra reacción…Pero lo nuevo fue cuando tomó mamá la palabra.

_Yo quise a papá desde la primera vez que lo vi. Llevaba poco tiempo como profesora en la Facultad, cuando una tarde al salir de mi despacho, me doy casi de bruces con el catedrático de griego que sale del suyo. Me sonríe y me da las buenas tardes. Recuerdo que iba con mucha prisa. Me pareció que había iniciado el saludo frente a mí y lo había acabado a kilómetros. Pensé ¡qué prisa! Parece el conejo blanco de Alicia. Pero su sonrisa, tan dulce, tan limpia, y su voz me dejaron una sensación que jamás había sentido. Luego, cuando las cosas fueron evolucionando, comprendí que ya en ese momento lo había empezado a querer.

-Pero, bueno. Eso no me lo habías dicho nunca, dijo papá. ¡Con que el conejo blanco de Alicia! El de “me voy me voy ya son las tres”. Solo que en mi caso eran las seis menos cuarto.

_Es que me daba vergüenza.

_Te daba vergüenza. Y yo dándote la murga con mis historias y mis nervios. Como cuando me declaré, tan torpemente que acabaste pidiéndome una declaración romántica.

¡Cómo nos gustó saber todo aquello!  A todo esto, mis padres se miraban con ternura, se rozaban una mano, se hacían una caricia. Era gloria bendita verlos juntos.

 Paulatinamente nos íbamos enterando de detalles de la vida de ambos. Lo que sabemos de mamá empieza, creo, en el año 1968. Lo de antes no tiene valor, nos decía. Y entonces agregaba papá: es el momento en que empezó a ser una luchadora. Siempre la calificó así con gran admiración.

-Luchadora y soñadora, agregaba ella.

  La parte importante de papá empezaba casi en nuestro nacimiento.

  Así es como con toda la información recabada a lo largo de los años, Guille y yo decidimos que la vida de nuestros padres era la más hermosa historia jamás vivida y contada. Y decidimos escribirla para que siempre nos sirviera de guía y modelo a los cuatro hermanos y a nuestros hijos.

  La encargada de la redacción fui yo, que para eso soy la filóloga y literata. Decidí crear un narrador omnisciente, algo así como un duendecillo que revoloteaba sobre nosotras vidas y lo sabía todo. Tuve que inventar algunos diálogos y algunos monólogos, pero sin alejarme de la verdad, siempre basándome en lo que nos habían contado y habíamos vivido. Y ayudada por la forma en que siempre nos habían contado su, nuestra, vida. A veces, puede parecer que hay un cierto desorden cronológico. No es eso exactamente, sino que los relatos de mis padres eran así: de un acontecimiento, de una anécdota, surgía otro anterior o posterior y así se iban enlazando sus historias como las cerezas en su cuenco.

No obstante, creo que eso le da más realismo y verosimilitud al relato.

  En la celebración de sus Bodas de Plata, se la regalamos en una encuadernación hecha por nosotros, todo personal, no queríamos que nadie, como dijo un día papá,” metiera las narices en nuestras vidas”

Isaac y Violenta se encargaron de confeccionar un bonito álbum de fotos con una selección muy especial y alternando textos alusivos a su, a nuestra, vida: poemas, incluso frases personales.

  Les emocionó y nos lo agradecieron. Al día siguiente salieron hacia ese viaje pendiente. Ya son libres. Guille y yo nos independizamos hace tiempo e incluso los hemos hecho abuelos. Isaac, con eso de su carrera en lenguas modernas no para ni en casa ni en España, siempre perfeccionando otro idioma. Violeta ha seguido a mamá y es historiadora. Sigue en casa, pero ya puede quedarse sola, han comprendido. Además, Guille y yo no la vamos a perder de vista; es nuestra pegue y lo será siempre. Fue un regalo de mis padres a mí, pues dicen que cuando nació Isaac les pedí una hermanita.

Eso sí. A la menor oportunidad hacemos piña.

 Ni que decir tiene que este relato en ningún caso será publicado a pesar de la falta que hacen en el mundo personas como nuestros padres. Dos seres que nacieron para amarse y amar. A sus hijos y su trabajo.

¡Gracias, papá y mamá por ser así!

Guille, Marina, Isaac y Violeta.

FIN